Esta mañana, una persona a la que considero un sabio, me ha dicho la siguiente frase:
«La vida es un regalo que te ha sido dado hoy, no olvides que, con toda certeza, habrá algún día en que no se te concederá»
Es una frase que me ha impresionado profundamente y que intentaré recordar cada día al despertarme.
This morning, a wise man told me this phrase:
«Life is a gift that has been given you today, do not forget that, certainly, there will be some day when you will not receive it»
This phrase has impressed me deeply and will try to remember every day when I wake up.
Archivo de la etiqueta: poesía
Cómo escoger un libro. How to choose a book.
Para mi, escoger un libro, en una librería o en una biblioteca, era un auténtico problema.
Siempre me da la impresión de estar en un hospicio.
Los libros me miran silenciosamente esperando ser elegidos, suplicando que dé vida con mi lectura la historia que llevan aprisionada en sus páginas.
Pasaba mucho tiempo mirando portadas, paseando indeciso, leyendo argumentos… hasta que, un día, descubrí un método infalible y rápido para realizar mi elección en menos de un minuto.
Entro en la biblioteca, me sitúo delante de una estantería llena de libros. Con mucho cuidado de no mirarlos, cierro los ojos, respiro hondo y con mi mano abierta me dejo guiar por el azar y, en una especie de pequeño estado de trance, dirijo mi mano abierta al viento hacia uno de ellos y… ¡ya está!
¡Ese es el elegido!
Muchas veces son libros con portadas vulgares, que yo nunca hubiera escogido, sobre temas que no me hubieran parecido interesantes, pero que después han resultado ser una gran sorpresa.
Como en las personas, la belleza está en el interior, la apariencia externa condiciona muchas veces nuestras decisiones en exceso.
Para estas cosas, me gusta dejarme guiar por el azar. Nos asusta reconocer lo importante que es en nuestras vidas.
Entonces, ¿porqué no dejarle que guíe, con nuestra aceptación, algunas de nuestras decisiones?
A mi me funciona…y me ha proporcionado maravillosas sorpresas.
¡Pruébalo!
For me, choosing a book in a bookstore or a library, was a real problem.
It always gives me the impression of being in a hospice.
The books, look at me silently, waiting to be chosen, begging that I give life with my reading the story that are trapped in their pages.
I spent much time looking covers, undecided walking, reading arguments … until one day I found a quick and foolproof method to make my choice in less than a minute.
I go into the library, I stand in front of a bookshelf full of books. With careful not to look at them, I close my eyes, breathe deeply and open my hand guided by chance and, in a small state of trance, I extend my open hand to the wind and… Done!
That’s the one!
Often are books with vulgar covers, I never would have chosen them, on issues of little interest to me, but later proved to be a great surprise.
As in people, beauty is in the interior and external appearance conditions many times over our decisions.
For these things, I like to be guided by chance. It scares us to recognize how important it is in our lives.
So… Why not let it to guide, with our acceptance, some of our decisions?
Really works for me … and has given me wonderful surprises.
Try it!
Todos. All the people.
Bach
Una tarde gris. A gray afternoon.
Estoy en mi clase, es una tarde gris de otoño.
El viento helado sopla afuera; en el atril, un sencillo estudio de Fernando Sor.
Una y otra vez mi alumno se equivoca en los mismos lugares, yo repito las mismas palabras de cada semana.
Sus torpes dedos, confusos, intentan encontrar las notas, fracasan continuamente por la falta de practica.
El tiempo pasa despacio, muy despacio.
La música, en vano, intenta conquistar su alma sin conseguirlo.
La guitarra intenta en mostrarle con su bello sonido que vale la pena el esfuerzo.
Todo es en vano, empieza a hablarme de sus cosas: de lo feliz que es corriendo por el campo, jugando con sus amigos, de lo que disfrutó en una fiesta…su pensamiento, como siempre, está en otra parte.
Intento entender qué hacemos allí los dos, y me cuesta mucho esfuerzo pensar que no estoy perdiendo el tiempo.
De repente, mientras él me habla, empiezo a pensar en la tarde fría, en la gente que estará ahora mismo trabajando al aire libre, en la que está en casa por que no encuentra trabajo, en las familias que no pueden salir adelante por la crisis, en los millones de personas en todo el mundo que estarán realizando un trabajo monótono, que odian y que se verán obligados a hacer toda su vida por un sueldo mísero…y entonces, me acuerdo de cual es mi deber en este momento y en lo afortunado que soy por poder dedicarme a la música, a la enseñanza, a la guitarra.
Sonrío; pienso «GRACIAS», y vuelvo con energía a mi misión: a mis consejos, a mis frases…
I am in my class, is a gray autumn afternoon.
The icy wind blowing out; on the stand, a simple study from Fernando Sor.
Again and again my student makes a mistake in the same places, I repeat the same words every week.
His clumsy fingers, confused, trying to find the notes, continually failing for lack of practice.
Time passes slowly, very slowly.
Music, in vain, tries unsuccessfully to win his soul.
The guitar tries to show him his beautiful without success.
Everything is in vain, he begins to talk of other things: how happy he was running around the field, playing with friends, than he enjoyed at a party … his thoughts, as always, are in other places.
I try to understand what we are doing here, and it costs me much effort to think I’m not wasting time.
Suddenly, while he speaks, I start thinking about the cold afternoon, the people who now will be working outdoors, are at home because can not find job, families who are suffering by crisis, the millions of people around the world who will be doing a monotonous job that hate and will be forced to do it all them life for a miserable wage … and then I remember what is my duty in this time and how lucky I am to be able to work in music, teaching, in the guitar.
I smile, I think «THANKS», and come back with energy to my mission: to my advices, my words …
Dos frases, dos sabios. Two sentences, two sages.
La sabiduría puede esconderse muchas veces en las personas más sencillas y puede aparecer en el momento más inesperado.
Me gustaría compartir con vosotros dos ejemplos.
Trabaja en un supermercado de un pueblo de montaña, cerca de donde suelo descansar durante el mes de agosto con mi familia.
Tiene el pelo blanco y su piel pálida, que le dan un aspecto de tener más años de los que seguramente tiene.
Siempre lleva una bata azul, hace gestos exagerados, ruidos con la boca mientras prepara las bolsas, onomatopeyas extrañas mientras va a buscar un producto a la estantería.
Los niños se ríen de él, cualquiera diría que hay algo que no funciona en su cabeza…
Hace años que observo que en su supermercado siempre suena música clásica.
Este verano le pregunté: ¿Te gusta mucho la música clásica? ¿verdad?
Su respuesta fue sorprendentemente profunda: Si, me ayuda a vivir.
El otro ejemplo.
Estoy dando un concierto como solista en un pequeño pueblo cerca de Lleida.
En la primera fila, hay un anciano, que aplaude muy fuerte, y que alguna vez dice ¡Bravo!.
El público y yo sonreímos, y pensamos que es un poco exagerado con sus gestos, sus gritos…
Su cara quemada por el sol y su aspecto, hablan posiblemente de un campesino.
Después de la “Danza del molinero” de Manuel de Falla, está emocionado y de repente empieza a hablar:
“Perdone, Señor Profesor, nunca hubiera pensado que dos manos y seis cuerdas pudieran llegar hasta lo más íntimo del corazón”
Dos frases, sobre la música, sobre la guitarra, para pensar en ellas toda la vida.
Wisdom can often hide in the most simple people and may appear in the most unexpected moment.
I’d like to share with you two examples.
He works in a mountain village supermarket, near where I usually rest during August with my family.
He is white hair and pale skin, looking to him seems to be more years than he probably is.
Always wears a blue robe, he makes exaggerated gestures, noises with his mouth while preparing the bags,foreign onomatopoeia while he finds a product from the shelves.
The children laugh at him, you’d think there’s something wrong in his head …
Years ago I observe that in his supermarket always sounds classical music.
This summer I asked: Would you really like classical music? Isn’t it?
His answer was surprisingly deep: Yes, it helps me to live.
The other example.
I’m playing a solo concert in a small town near Lleida.
In the first row, there is an old man, clapping very strong, and sometimes saying “Bravo” !.
The public and I smile, and we think he is a bit exaggerated with his gestures, shouting …
His sunburnt face and appearance, possibly speak about a peasant.
After the “Danza del Molinero” of Manuel de Falla, is excited and suddenly begins to speak:
“Excuse me, Professor, I never would have thought that two hands and six strings could to penetrate to the innermost of the heart”
Two sentences about music, about the guitar, to think about them forever.
Lentamente. Slowly.
Leo en la sala de espera del médico, un artículo que me llama la atención.
Trata sobre el Movimiento Slow, o, lo que es lo mismo, una nueva filosofía que consiste en hacer todas las cosas lentamente, en el doble de tiempo que emplearías normalmente.
Un «Slow» nunca aparcará en la puerta del trabajo, lo hará un poco lejos para poder pasear unos minutos, comerá en los «Slow Food», donde empleará el máximo de tiempo en saborear la comida.
Me gusta mucho la idea, existen incluso «Ciudades Lentas» donde se practica este movimiento.
Sin saberlo, hace tiempo que lo practico con mi guitarra: antes de un concierto toco todas las obras exagarademente lentas para poder conocer, con mucho cuidado cada una de las notas, también le digo siempre a mis alumnos que lo hagan.
El tiempo es un bien precioso, escaso.
Nosotros queremos poseerlo, dominarlo, y el objetivo del hombre en el siglo XXI es hacer muchas cosas en el mínimo tiempo posible, creo que es un error.
Si seguimos así, nos daremos cuenta que la vida se nos escapa de las manos aún más deprisa, por no tener tiempo en observarla con calma, con el espíritu en paz, sin prisa y, al final de nuestros días, cuando ya es demasiado tarde, podemos darnos cuenta que no hemos vivido de verdad por estar siempre corriendo, sin detenernos a contemplar toda la belleza que pasa a nuestro lado.
Para controlar al tiempo, hay que observar en silencio, como se desliza lentamente ante nuestros ojos.
Vive amigo, disfruta de la vida, apasionate, pero hazlo lentamente, sin prisa.
It’s about the Slow Movement, or, what is the same, a new philosophy to do all the things slowly, in double time that normally would use.
A «Slow» never park in front of the work, it will has a little far to be able to walk a few minutes, he will eat in the «Slow Food», where he will use the maximum time to savor the food.
I like very much the idea, there are even «Slow Cities» where it can to practice this movement.
Without knowing it, I have practiced it with my guitar: I play before a concert all works exaggeratedly slow to hear, very careful, every note, and I tell to my pupils to do it.
Time is a good precious, limited.
We want dominate it, and the goal of the twenty-first century man, is to do many things in the minimum time possible, I think this is a mistake.
If we continue this way, we realize that life escapes from our hands even faster, by not having time to observe calmly, with the spirit in peace, without haste and, at the end of our days, when it is too late , we realize that have not really lived by being always in a hurry, without time to stop to contemplate the beauty that happens in our side.
To control the time, we must observe in silence as slips it slowly in front of our eyes.
Live my friend, enjoys life, excite, but do it slowly, without haste.
Un paseo. Taking a walk.
Pasear sin rumbo, sin prisa, por puro placer, con los cinco sentidos alerta.
Mirando cada detalle.
Escuchando.
Sintiendo el viento.
La sinfonía continua de la ciudad.
El sol de esta luminosa tarde de primavera.
Descubriendo el tesoro de sencillas y valiosas sorpresas.
Unos ojos azules enormes, preciosos, casi transparentes.
Árboles de flores olorosas.
Un pequeño perro me sigue con su mirada por su enorme balcón.
Mirando entre las cortinas el lugar donde te besé por primera vez.
Personas alegres, tristes, pensativas…
Ojos sonrientes, pasos tristes, niños corriendo, ancianos cansados.
Sin rumbo, sin prisa.
El tiempo se desliza lentamente bajo mis pies.
Un tesoro de sencillos detalles quizás esté escondido al lado de tu casa.
¿A qué esperas?
Walking without rush, without course, for pure pleasure, with the five senses alert.
Looking every detail.
Listen.
Feeling the wind.
The continuos symphony of the city.
The sun of this brighting spring afternoon.
Discovering a treaure of simple and valuable surprises.
A blue eyes enormous, precious, almost transparent.
Tree of fragant flowers.
A small dog follows me with his eyes on his huge balcony.
Looking between the curtains where I kissed you for the first time.
People happy, sad, pensive …
Smiling eyes, sad steps, children running, old persons tired.
Without course, without rush.
Time is slowly slipping under my feet.
A treasure trove of simple details may be hidden next to your house.
What are you waiting?
Porqué gira el mundo. Why the world tours.
Tarde de primavera. Spring’s afternoon.
Hoy ha llovido en Lleida, algo cada vez menos frecuente.
De repente, por la tarde, la lluvia ha cesado y el sol ha aparecido entre las nubes bañando a la ciudad con una sorprendente luz alegre, luminosa, mágica.
Albert y yo hemos decidido coger nuestras bicicletas y disfrutar de este inesperado regalo y pasear al lado del río. El aire olía a tierra y hierba mojada.
El agua del río brillaba agradecida a la luz del sol, mientras el enorme castillo contemplaba la ciudad orgulloso de tanta belleza.
Parecía un viejo padre que contempla, lleno de bondad, como se divierten sus hijos.
Es como si la ciudad hubiera nacido de nuevo, purificada por la transparencia del agua.
A nuestro lado hemos visto familias, jóvenes enamorados, inmigrantes…todos parecían mirar al futuro con esperanza, nada malo podía pasar con un paisaje así.
Hoy Lleida me ha parecido la ciudad más bella del mundo.
Today it rained in Lleida, something increasingly rare.
Suddenly, in the afternoon, the rain has stopped and the sun has appeared in the clouds bathes the town with a surprising and cheerful light, bright, magical.
Albert and I have decided to take our bikes and enjoy this unexpected gift and take a walk beside the river.
The air smelled of wet earth and grass.
The river shone grateful to the sunlight, while the huge castle contemplated the city prouds of so much beauty.
It seemed an old father who see, full of goodness, as their children are having fun.
It’s as if the city had been born again, purified by the water transparency.
We saw families, young lovers, immigrants … all seemed to look to the future with hope, nothing bad could happen in a landscape like this.
Today Lleida has seemed to me the most beautiful city in the world.