Aquel que dijo «Más vale tener suerte que talento» conocía la vida en profundidad.
Así empieza la última genial película de Woody Allen «Match Point».
La suerte está presente en cada uno de los actos de la vida.
Un golpe de suerte puede cambiar nuestra vida, puede convertirnos en heroes o en villanos.
Puede decidir que tengamos trabajo para siempre o que estemos buscandolo toda la vida.
Recuerdo la lista de aprobados en las oposiciones para Conservatorios de Música, pocas décimas me separaban a mí, con un buen trabajo conseguido, de otros que quizás todavía lo estén buscando.
¿Talento? sí, pero también suerte.
Nos asusta pensar cuantas cosas no dependen de nosotros y sólo del capricho de la suerte.
La naturaleza nos ha dado una única arma para luchar contra ella: la intuición.
Es curioso, cuando nos dejamos guiar por ella y creemos en nuestras posibilidades, normalmente, la suerte aparece.
A todos los que os examinais estos días: trabajad, escuchad vuestra voz interior y… suerte.
That one that said «More bond to have luck than talent» knew the life in depth.
Thus is how the brilliant film of Woody Allen «Match Point» begins.
The luck is present in each one of the acts of the life.
A stroke of luck can change our life, can turn us in heroes or villains.
It can decide that we have work for always or that we are looking for it by life.
I memory the list of approved in the competitive exam for Conservatories of Music, few tenth separated me, with a good finded work, of somepeople that perhaps still is looking for it.
Talent? yes, but also luck.
It scares to think whichever things does not depend of us and only on a whim of the luck.
The nature has armed us, to fight against her, with a only thing: the intuition.
It is peculiar, when we let ourselves guide by her and we believe in our possibilities, normally, the luck appears.
To all those that have exams these days: work, listen to your inner voice and…luck.