En un artículo anterior, os hable de la carta que recibí desde El Líbano de Abraham Obeid.
Pocas semanas antes de que estallara la guerra en su país, me realizó un pedido de varias obras de mi catálogo. Yo le envié el material y después recibí otra carta manuscrita, como en las otras ocasiones, en la que me explicaba más cosas acerca de su trabajo y como se interesó por el material de GuitarInEnsemble.
El señor Obeid es profesor de guitarra en el Conservatorio de Trípoli, en el norte de El Líbano. Enseñan instrumentos occidentales y también instrumentos tradicionales árabes. Él trabaja para promocionar la Guitarra Clásica en un país donde es poco conocida. No dispone de acceso a Internet, descubrió mi trabajo a través de un artículo en la revista americana Guitar Review el año pasado. Pensó que era una idea muy interesante que ofrecer a sus alumnos y estimularlos a tocar la guitarra con otros instrumentos de su escuela. Para mí siempre es motivo de alegría el ver que mi trabajo puede ser interesante para profesores de otros países y, especialmente en este caso,con el esfuerzo que le ha supuesto al Señor Obeid contactar conmigo.
Al poco tiempo de recibir esta carta, he visto, con inquietud como su país se ha visto arrastrado a una guerra injusta que lo ha sumido en una situación muy difícil a nivel humano y también de infraestructuras.
Espero que se encuentre bien y pueda, muy pronto, continuar buscando y enseñando la belleza que encierra el sonido de una guitarra en un país en paz.
In a previous post, I tell you about letter that I received from Lebanon of Abraham Obeid.
Few weeks before the war in his country exploded, he made an order of several works of my catalogue. I sent the material to him and later I received another hand letter, like in the other occasions, in which he explained more things to me about his work and as he were interested in the material of GuitarInEnsemble.
Mr. Obeid is professor of guitar in the Conservatory of Tripoli, in the north of the Lebanon.
They teach occidental and Arab traditional instruments. He works to promote the Classic Guitar in a country where it is little well-known.
He does not have access to Internet, he discovered my work through an article in the American magazine Guitar Review the last year. He thought that it was a very interesting idea that to offer to his students and to stimulate them to touch the guitar with other instruments of his school.
For me always it is reason for joy seeing that my work can be interesting for professors of other countries and, specially in this case, with the effort that has supposed to Mr.Obeid contact with me.
Soon after receiving this letter, I have seen, with restlessness like his country has been dragged an unjust war that he has sunk it in a very difficult situation at human level and also of infrastructures.
I hope that he feels well and he will can, very soon, to continue looking for and teaching the beauty that locks up the sound of a guitar in a country in peace.