Hay un lugar del que sólo los bosques hablan,
un lugar que sólo puede verse con los ojos del río,
oculto por la bruma,
inundado de estrellas,
olorosos dátiles,
construido de fuego,
fina arena,
dulce cristal,
verde hierba.
Donde el alma del viento
de tus labios llega,
y mueve las frías aguas.
Hay un lugar repleto de sirenas y corales.
Refugio de sueños olvidados.
Donde la luna de otoño revela el secreto del lago.
Lleno de luz, vida, largas miradas,furtivas caricias.
Donde el tacto de la luz es suave como una pluma,
ligero como la brisa.
Hay un lugar donde se prolonga la magia,
se estrechan las manos,
se cierran los ojos,
para parar el tiempo.
Donde si se abraza,
nunca es para apartarse,
porque la certeza del adiós no existe.
Hay un lugar…