La naturaleza, en toda su inabarcable riqueza, me produce una gran variedad de sentimientos y emociones. Es para mí una inagotable fuente de inspiración.
En los bosques, en las montañas, en los ríos…me siento en casa, en paz conmigo mismo, aunque en ocasiones, sin saber muy bien porqué, también vienen a visitarme la tristeza, la melancolía y la añoranza.
En esta atmósfera se mueve la obra que os presento hoy: “En la soledad de las montañas”, primer movimiento de “El lenguaje del río”.
¡Espero que os guste!
Podéis descargar gratuitamente la partitura en el apartado de música para guitarra sola.