Como siempre en el mes de agosto, estoy con mi familia disfrutando de unos fantásticos días de vacaciones en el bello paraje natural de La Vall de Boí.
Nos encanta realizar excursiones por las montañas, seguir los senderos que transcurren entre imponentes montañas, lagos glaciares y curiosas marmotas.
La ascensión más importante que hemos realizado es la del Pico de Ballibierna (3067m) en el Parque Natural Posets Maladeta
Para mi fue algo muy especial, ya que nunca había superado la barrera de los 3000 metros.
La sensación de pasear por la cresta de esta impresionante mole de granito es fantástica, el silencio en la cumbre, sobrecogedor y la vista espectacular.
Allí se encuentra el mítico «Pas del Cavall» (Paso del Caballo), impresionante pared vertical, con precipicio a ambos lados, que debe su nombre a que, para superarla, hay que literalmente «montar» en ella como si de un caballo se tratara.
A pesar de la insistencia de mi hijo Albert, mucho más audaz y experimentado, me faltó valor para realizar semejante proeza…
…para mi la proeza fue llegar tan arriba.
¡Nunca había llegado tan alto!